Muchos incidentes pueden poner en riesgo una relación de pareja. Sin embargo, la pérdida de un hijo resulta ser uno de los factores con más probabilidades que quebrar la unión de los padres.
De acuerdo con reciente estudio de la Universidad de Michigan de Estados Unidos, publicado en la revista Pediactrics, la estabilidad de la pareja será afectada si la madre pierde al hijo durante el embarazo o si el feto nace muerto.
Durante la investigación se encontró que las uniones mostraron un riesgo del 22 por ciento más elevado de romperse por la pérdida durante un embarazo.
Sin embargo, le peligro es aún
mayor si se conoce de la muerte del bebe durante el parto. En ese caso hay un 40 por ciento más de riesgo de que se concrete la ruptura.
mayor si se conoce de la muerte del bebe durante el parto. En ese caso hay un 40 por ciento más de riesgo de que se concrete la ruptura.
Según el informe, el peligro será constante durante los tres años siguientes al aborto y se mantendrá hasta por nueve años si el feto nace sin vida. Además, el caso podría agravarse si la pareja ya tenía algunos problemas en su relación.
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