La masturbación y sus consecuencias

La masturbación, tanto femenina como masculina, es la estimulación de los órganos genitales con el objeto de obtener placer sexual, pudiendo llegar o no al orgasmo.
Puede realizarse por uno mismo en solitario o como estimulación realizada sobre los genitales de otra persona con los mismos fines placenteros, como ocurre en la masturbación mutua, suele efectuarse con las manos o mediante el frotamiento de los genitales contra algún objeto adecuado, como los llamados «juguetes sexuales», para obtener este tipo de excitación.
Se atribuye a Sigmund Freud el descubrimiento de que la masturbación es algo común en la infancia. Sin embargo, debemos más el conocimiento de la sexualidad humana en la actualidad a un coetáneo suyo: Havelock Ellis. Este autor no sólo señaló que era común en los hombres, sino que también se trataba de una práctica habitual en las mujeres de todas las edades.

Para muchas personas, la masturbación es un tema tabú, existen muchos mitos sobre el tema perjudiciales que pueden hacer que uno se sienta incómodo, pudiendo provocar culpa, vergüenza y miedo. Aclaremos algunas cuestiones. La masturbación es una actividad natural y común tanto para el hombre como para la mujer. 

¿Cuándo se comienza a masturbar la gente?  Esta actividad puede comenzar en cualquier momento de la vida de una persona. Muchos niños comienzan a masturbarse mientras crecen y exploran los cambios que se producen en sus cuerpos. Ya en la adolescencia empiezan a tener fantasías sexuales lo cual es muy normal.

¿Cuáles son los beneficios?  Un estudio realizado en el Institute of Michigan encontró que los hombres que habían eyaculado más de cinco veces a la semana eran un tercio menos propensos a desarrollar cáncer de próstata. Las toxinas que causan esta enfermedad se acumulan en el tracto urogenital, el cual, cuando se frota, se realiza una especie de enjuague y las toxinas son expulsadas.

Con la edad, naturalmente, se pierde el tono muscular. La masturbación trabaja los músculos pélvicos para prevenir la disfunción eréctil y la incontinencia. Debes tratar de hacer de buena manera esta clase de ejercicio para obtener resultados sólidos, pudiendo causar dolor debido al esfuerzo.

Algunos estudios han encontrado que mejora la movilidad. "En teoría, un hombre masturbándose libera los espermatozoides residuales de túbulos del semen. Esto abre camino para nuevos y "mejores" espermatozoides que se liberan", dice la sexóloga Mahesh Nawal.

La eyaculación aumenta los niveles de la hormona cortisol, dice el doctor Ashish Sabberwal, consultor de urología del Fortis Escorts Institute, de Nueva Delhi. El cortisol, que por lo general tiene una mala reputación como una hormona del estrés, en realidad ayuda a regular y mantener la inmunidad, pero en pequeñas dosis. "Puede producir el entorno adecuado para un sistema inmunológico fortalecido," asevera Sabberwal.

Libera una gran cantidad de neuroquímicos como la dopamina y la oxitocina, que levantan el ánimo, aumentan la satisfacción y activan los circuitos cerebrales. Un orgasmo es la mayor explosión no farmacológica de dopamina disponible, y beneficia a la salud en más de una forma.

La activación cerebral que produce un orgasmo es más completa e intensa que la que supone realizar crucigramas o sudokus, según ha explicado el investigador Barry Komisaruk a The Times. La razón, según Komisaruk, es que el clímax sexual ejercita el cerebro en su conjunto al generar un "gran aumento del flujo sanguíneo" que "lleva todos los nutrientes y oxigenación" necesarios para la mente. Sin embargo, "los ejercicios mentales como los crucigramas y el sudoku incrementan la actividad mental pero sólo en áreas relativamente localizadas; el orgasmo las activa todas".

Afirmaciones populares:

Los hombres lo hacen más- Suele afirmarse que los hombres lo realizan con una frecuencia semanal, que es el doble de veces la de las mujeres. Pero existen investigaciones que demuestran que los hombres mienten sistemáticamente en las encuestas sexuales exagerando la frecuencia con la que acuden al autoerotismo, mientras que las mujeres mienten en sentido contrario, minimizando la frecuencia (es típica la respuesta femenina de hacerlo una vez al mes). Si corregimos las afirmaciones de unos y otros, como han realizado algunas investigaciones serias, los datos tienden a converger: así, hombres y mujeres se masturban con una frecuencia similar.

Los hombres comienzan antes que las mujeres-
Según los estudios recopilados por Gustav Klimp, tampoco es cierto que los hombres se inicien en la masturbación antes que las mujeres por tener un órgano sexual tan "evidente" y que tienen que tocarse a diario por razones fisiológicas e higiénicas.
Está demostrado que hay más mujeres que hombres que se inician antes. Lo hacen así entre el 20% y el 42% de las mujeres, al menos, y entre el 3% y el 13% de los hombres. También hay un 42% a 52% de mujeres que comienzan a hacerlo, como los hombres, durante la adolescencia. Por eso, las mujeres aprenden espontáneamente con mayor frecuencia que los hombres, quienes suelen iniciarse más tarde, tras hablar con sus compañeros o leer sobre el tema (mujeres: entre el 57% y el 62%; hombres: 38%)

Las personas dejan de masturbarse cuando inician relaciones sexuales- Según los estudios citados en la obra, los hombres y las mujeres continúan realizándolo después de establecer relaciones de pareja. Incluso aunque tales relaciones sean satisfactorias, el 75% de los varones y el 75% al 91% de las señoras emparejados continúan haciéndolo. Esta idea contradice, igualmente, la afirmación popular.

Se aíslan socialmente- El psiquiatra Johann Neponuk niega este supuesto, concluyendo que la masturbación no produce aislamiento, habiéndose comprobado que la mayoría de los seres humanos se masturban y tienen relaciones sexuales con normalidad.

Les causará disfunción eréctil o impotencia- No está  demostrado tal argumento, incluso la masturbación es utilizada como tratamiento de varias disfunciones sexuales. Muchos impotentes invocan a la masturbación como causa de su impotencia. Cuando se conocen bien los mecanismos de la sexualidad no podemos cometer el error tan extendido de confundir las cosas. Generalmente muchos pacientes en busca de tratamiento van obsesionados hablando de que lo que les sucedía era por masturbarse mucho durante la adolescencia, a pesar de que se insista en otros puntos.

A lo largo de la historia, siempre hubo voces que afirmaron que la masturbación era un acto inmoral. 
No fue hasta el siglo XVIII que al supuesto "daño moral" que ocasionaría la masturbación se añadió el "daño físico": comenzó a decirse que ocasionaba un sinnúmero de enfermedades. Se idearon muchos métodos para descubrir a los niños y niñas haciéndolo, y se crearon numerosos remedios. Algunos de ellos incluían: circuncisión sin anestesia, guantes ásperos, aparatos especiales que impedían acceder a los genitales, descargas eléctricas, tratar los genitales con ortigas, o extirparlos quirúrgicamente.
En décadas posteriores, el terrorismo psicológico reemplazó a las otras medidas. Por ejemplo, se decía a los niños que si se masturbaban les crecerían pelos en las manos, la cara se les volvería verde, se les secaría el pene o el clítoris, se volverían locos, les saldrían granos en la cara... En los EE. UU. y otros países angloparlantes, se comenzó a practicar de forma rutinaria la circuncisión neonatal debido a un supuesto efecto preventivo contra la masturbación y la clitoridectomía a las chicas que eran descubiertas haciéndolo. Esta última se abandonó bien entrados los años treinta, pero la circuncisión neonatal de los varones se sigue practicando.

¿Tiene consecuencias negativas?
Si te preocupa el hecho de masturbarte en exceso, hazte la siguiente pregunta: ¿Interfiere con mi funcionamiento diario? Si interrumpe o interfiere con tu trabajo, tus responsabilidades o tu vida social, quizá sean necesario que consultes con un terapeuta.
A muchas personas la masturbación les genera vergüenza o culpa. Los jóvenes que reciben mensajes negativos acerca de la masturbación trasladan sentimientos de vergüenza a la adultez. Aproximadamente el 50% de las mujeres y el 50% de los hombres que se masturban sienten culpa por hacerlo.
Los sentimientos negativos sobre la masturbación pueden ser una amenaza para la salud y el bienestar. Sólo tú puedes decidir qué es saludable y correcto para ti.